El Real Betis Balompié y el Real Madrid se enfrentarán este sábado por alzar el título de Copa de Campeones, que corona al mejor equipo juvenil de España cada año. Los blancos, grandes favoritos, pelearán por el triplete nacional, lo que sería una gesta histórica. Enfrente un conjunto bético que ha dominado Andalucía y se ha reforzado con piezas del filial. Nico Paz, Manuel Ángel, Assane Diao o Pablo García son algunos de los nombres a destacar de esta final. Mañana a las 13:00 horas en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas dará comienzo al partido juvenil más esperado del año.

El Real Madrid de “los bajitos”

Si algo ha caracterizado a este Real Madrid durante toda la temporada, y por lo que se recordará a esta generación,  es su gran dominio de los partidos. Sostenidos por Manuel Ángel, el equipo ha dado rienda suelta “los bajitos”, más propios de otros equipos y otras filosofías. Con Nico Paz, Palacios, Mesonero, Pol o Yeray, el Madrid ha demostrado una calidad en los últimos metros muy difícil de contrarrestar. Gonzalo ha puesto el gol y con sus más de 30 goles este año han ayudado el Madrid ha ganar casi todo lo que ha jugado.

Tras ser campeones del Grupo 5 de la División de Honor, sin perder ningún partido y con una última goleada a su máximo rival en el partido que decidía el título, los de Arbeloa llegaban a esta Copa de Campeones con fuerza e infundiendo temor a sus rivales. Sin olvidar tampoco la Copa del Rey conseguida hace un par de meses, sólo un temible AZ Alkmaar demostró ser superior en la UEFA Youth League.

Una final trabajada y sufrida para el Madrid

El sorteo de esta Copa fue caprichoso y el Real Madrid se enfrentó al mejor segundo clasificado de la liga: el Atlético de Madrid. Tras apabullarles en el último partido de liga (5-0), los blancos llegaron al Wanda Alcalá sin bajar el pistón. 0-2 y victoria convincente para poner la primera piedra en la construcción de su título. La vuelta, en cambio, fue diferente.

Torres sacó petróleo de las pocas debilidades que tiene esta plantilla: la transición defensiva. Con un equipo que lanza a sus laterales como extremos y junta a sus bajitos por dentro y el cerrar con dos centrales y un pivote, hace que un buen contragolpe pueda ser efectivo. Los rojiblancos ganaron esos duelos y tuvieron la efectividad para mandar el partido a la prórroga, donde los blancos se impusieron demostrando su pegada.

El último escollo hasta la final fue una U.D Las Palmas invicta en su grupo, con sólo un empate y la portería menos goleada de la liga. Jugadores rápidos y habilidosos, “made in Canarias”, como Johan Guedes, Elías Romero o Iván Medina, y una defensa fuerte. Las transiciones fueron otra vez el punto a explotar, pero los de Arbeloa sí las taparon mejor. Aún así, el partido se iba empate a uno a los minutos finales cuando apareció César Palacios en el 82 para dar la victoria al Madrid.

En general, un equipo muy coral y completo, con jugadores de un pie formidable y comprometidos en defensa. Muchas variables de sistema y piezas de recambio. Gol, dominio y superioridad técnica. Un equipo muy redondo que está a un partido de corroborar su dominio en el territorio español.

El Real Betis, de tapados a finalistas

El Real Betis ha logrado coronar una gran temporada con una presencia más que merecida en esta final de la Copa de Campeones. El final agónico de liga en la DH7, la temporada casi perfecta de Las Palmas, la actuación del Almería en Copa del Rey o la imbatibilidad del Sevilla han desviado en muchas ocasiones la atención de algo que ya es innegable: el temporadón del Real Betis.

Temporadón porque se impusieron en una DH4 en la que no solo batieron a un Sevilla que no conoció la derrota, si no también a un sorprendente Almería que, en estado de gracia, ha rozado los títulos de liga y Copa del Rey. Temporadón porque han sabido reponerse a los golpes que se han llevado (0-3 vs Las Palmas, por ejemplo),y porque han aguantado en los malos momentos de los partidos para poder seguir adelante, como en cuartos de final frente al Valencia. Y temporadón porque, nombre por nombre, esta plantilla del Real Betis es capaz de luchar por todo.

Precisamente esa primera eliminatoria de esa Copa de Campeones viene a resumir en 180 minutos la temporada del Betis. Exhibición de talento individual y juego alegre en la ida, con Assane Diao a la cabeza, saber sufrir y aguantar cuando las cosas no van bien en la vuelta, y acabar imponiéndose en la segunda parte en una demostración de carácter y de lo que es el juego de este Betis.

Un equipo completo y valiente

Un juego que se sostiene sobre dos centrales valientes para sacar la pelota, pero prácticos y contundentes cuando toca apretar los dientes en defensa. Dos laterales, especialmente Busto, incansables para subir y generar superioridades en ataque, un centro del campo liderado por su capitán, Vela, para dirigir el ataque del equipo, y por delante, talento a raudales para marcar la diferencia en el último tercio. Carlos Reina, Pablo García, Ángel Ortiz, Ginés Sorroche o Rodrigo Marina han sido jugadores que se han ido mostrando decisivos cuando ha tocado para traer al Betis hasta aquí.

Capacidad para desbordar, para alternar posiciones y asociarse en los últimos metros del campo han sido un quebradero de cabeza para todas las defensas a las que se han enfrentado. Y como guinda para esta Copa de Campeones, la figura de Assane Diao en punta está marcando totalmente la diferencia aguantando balones de espaldas, con conducciones eternas para ganar metros y una tremenda efectividad en el área para que eso se pueda traducir en el marcador.

Así las cosas, el Real Betis tiene las armas para llevarse la final, y pistas sobre como hacer daño al Madrid en las actuaciones de Las Palmas y Atlético de Madrid previamente mencionadas. Tienen 90 minutos por delante para redondear una temporada histórica para el club, eso sí, frente al equipo más potente de la competición.