En Barcelona arrasa en Milán en un partido que se esperaba muy competido en este duelo que enfrentaba al FC Barcelona y al Inter. El partido se disputaba en Italia pero los locales no han sabido aprovechar esa ventaja y desde el minuto uno los blaugranas fueron superiores.

Inter de Milán 1 – 6 FC Barcelona

Una presión alta y posesión constante y rápida fue clave en este caso para el FC Barcelona, aunque el primer tanto a su favor llegaría de otro modo distinto. Unai colocaría un centro desde el córner en el minuto 5′, y el balón se fue cerrando poco a poco hasta que Chadi Riad logró rematarlo y convertir el tanto desde el centro del área pequeña. Este gol suponía un desbarajuste temprano para las filas italianas y se empezó a notar como les hizo mucho daño psicológicamente. 

Inicio trepidante de los culés

En los siguientes compases de juego el Barcelona seguiría siendo muy superior y sus jugadores se empezaban a gustar con el balón. Tal es así que Ilias Akhomach casi logró hacer gol de una brillante jugada individual desde el perfil derecho. Sin embargo, cuando ya había superado a dos defensas rivales, disparó y el balón rebotó en la zaga italiana. Era prácticamente un gol cantado para los culés e Ilias pecó ciertamente de individualista, pero la belleza de la jugada le pidió terminar él mismo. 

Los blaugranas siguieron siendo muy incisivos en la presión y su rival apenas lograba acercarse al área rival. Fue en este caso de nuevo cuando a través de un córner, Unai de nuevo colocaría un buen balón al segundo palo al que remató Pelayo tras una leve caída en el área. El esférico acabó entrando y el colegiado desestimó cualquier tipo de falta en ataque por lo que los culés acabaron colocando el segundo gol en el minuto 19′.

Este inicio del FC Barcelona fue fulgurante. En el minuto 20′ ya habían rematado nueve veces y su rival estaba totalmente desorientado. Para suerte de los locales, justo a partir de este momento el juego se empezó a calmar y las ocasiones visitantes dejaron de llegar en masa. Aún así, eso no sirvió para que consiguieran crear peligro y lo acabaron pagando. 

La expulsión sentenció el partido

Llegaba ya el descanso cuando en el minuto 44′ Aleix Garrido se asoció de manera fantástica con Víctor Barberá para que el delantero catalán lograra hacerse hueco entre la defensa con un control soberbio y disparar. El balón fue rechazado por el portero pero el colegiado acabó pitando penalti a favor de los culés por un leve empujón a Barberá que le molestó a la hora de definir. Además, al ser una ocasión clara de peligro, el defensa rival acabó expulsado, por lo que su equipo se quedaría con uno menos a partir de ese momento. Como no podía ser de otra manera, el mismo Barberá colocó el tercero de los suyos al convertir el penalti con un buen disparo raso a la izquierda de la portería.

Con la reanudación del choque y la victoria momentánea por tres goles del FC Barcelona, la posesión de los culés a partir de este momento sería más lenta ya que no tenían prisa por marcar con esta situación. En estos nuevos compases las ocasiones dejaron de llegar hasta el minuto 60′, donde Garrido se encontraría con el balón en la frontal del área tras una mala salida de pelota de su rival. Aleix optó por la vaselina y apunto estuvo de entrar, pero el cuero se desvió por centímetros encima de la portería. 

Con el partido roto llegaron más tantos

En una nueva pérdida de balón llegaría la ocasión más clara a favor de los locales. En este caso el balón llegaría a su delantero, que remató con sutileza a portería pero Pelayo consiguió llegar para rechazar ese balón in extremis. El rechace calló también a un atacante del Inter, pero inexplicablemente el balón golpearía en la madera y no entró. Solo dos minutos más tarde los culés no perdonarían y elaboraron una preciosa juagada combinativa por la banda derecha con dos paredes para que Garrido de nuevo pusiera el balón en bandeja a Barberá, que puso el sexto en su cuenta en esta competición.

El aluvión culé no cesaría y de nuevo en el minuto 77′ conseguirían otro gol. En este caso la jugada se elaboró, con un pase largo que fue clave, desde la banda derecha hacia la izquierda para que Alarcón corriera por la banda. El extremo blaugrana dribló con soltura a su marca y acaba regalando el gol con un buen pase atrás a Unai Hernández. Con el partido ya roto por completo, tras una recuperación, el esférico llegaría a Aleix Garrido de nuevo, que puso un pase adelantado soberbio para dejar solo a Marc Guiu y que este definiera a la perfección picando la pelota por encima del portero rival.

El gol de la honra para el Inter llegó tras una pena máxima pitada por una dura entrada de Vicens que llegó tarde y se llevó por delante a su oponente. Los jugadores italianos seguirían tirando de orgullo para conseguir anotar algún gol más pero ya no había tiempo suficiente para más. Resultado final muy abultado de los culés que se ponen líderes de grupo con siete puntos en esta Uefa Youth League.

 

 

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